- Las cámaras delante de un bar o administración cualquiera dónde la gente chupa pantalla con fotocopias del afortunado número.
- Posiblemente el más gordo y bestia del pueblo descorche cava sin camiseta mientras grita y nos demuestra que él, y solo él, es el más garrulo.
- La abuela del quinto dirá que ya sabía que iba a tocar, que desde el momento que vio el número tenía un presentimiento (será la misma señora que me dejó anonadado viendo las noticias cuando comentaron que Letizia iba a casarse con el Príncipe y ella, que le había dado clase de pequeña, respondió como si nada: Yo ya lo sabía porque de pequeña la miraba y decía que esa niña tenía cara de Princesa).
- Alguno de los números premiados a priori era un número feo, de esos que nadie quiere porque lógicamente tiene menos posibilidades que los demás.
- La gente va a utilizar el dinero para tapar agujeros.
- El premio ha sido muy repartido.
- El dueño del bar o administración saldrá diciendo que no se quedó con ningún número, pero que llevarse dinero no es nada comparable a repartir toda esa ilusión (seguramente al acabar el día llegue a casa y se pegue un tiro).
- Entrevista a los niños que han cantado el número, de los cuales uno ni se atreverá a hablar mientras los demás están por detrás haciendo gilipolleces varias.
- Alguno de los niños se ha adelantado a los demás en el periodo de entrenamiento y tendrá una voz grave y pelos en los huevos.
La foto de arriba es del miércoles que fui por encargo a la administración de Doña Manolita en Gran Vía a comprar unos numerajos tragándome casi una hora de cola, tuve suerte, porque el día anterior había pasado por allí y la cola se doblaba. Y pienso yo, ¿No había crisis? Pues será curioso (o no) pero los españoles somos así, cuando hay algún problema gordo nos desentendemos y pasamos la responsabilidad a La Virgen para que me ayude y sino que me toque la Lotería. Los datos hablan por si solos, se han disparado las ventas, hay más gente que juega a cualquier tipo de lotería, aunque también se gasta menos, a parte de mil concursos que te pagan un sueldo de un año o la hipoteca (mierda de Antena 3 estafando con su 343). Me acuerdo de la paradoja de Giffen en economía: era algo así como que en Irlanda cuanto más subía el precio de las patatas, más se consumían. La explicación era que las patatas, un bien de primera necesidad, al aumentar el precio empobrecían la población que les llevaba a sólo poder comprar patatas. Pues algo parecido pasa con esto, pero npi (NI PUTA IDEA) de que tipo de bien es la Lotería y si la situación económica influye en su propia ley de oferta-demanda ni de que forma ( que se reuna el G-20, Madoff y toda esta gente que sabe tanto de estas cosas). En fin que si los que no tienen no hubieran comprado tantos números ni mandado mensajitos a Antena 3 tendrían algún dinerito de más ahora que les iria muy bien.
Yo también he comprado algún numerito, que tiene las mismas posibilidades de ganar que cualquier otro individualmente, pero que en conjunto me ganan por un 1/85000. Soy realista. Pero si me toca, además de dejar de ser un día de la Marmota más y pasar a ser uno de esos héroes anónimos (seguramente el garrulo sin camiseta y cava), diré que ya lo sabía y que tuve un presentimiento con mis dos santos cojones. (después borraré esta entrada)
SUERTE!!!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario